El Contador Público ¿Hombre Clave? - 5046 Visitas

Desde que tengo memoria, los que ejercemos la profesión de Contador Público tendemos a sólo ver lo negativo de nuestro trabajo.

Recuerdo que de estudiantes nos quejábamos de ser explotados porque nos daban la oportunidad de trabajar para hacer nuestro servicio social, prácticas o inicio de una relación laboral pagándonos poco, a veces sólo con ayuda para el transporte, pero dejábamos de lado el agradecimiento por los conocimientos adquiridos en esas jornadas, y pocas veces aprovechamos para empatar la teoría con la práctica, o preguntar a los jefes si lo aprendido era lo correcto.

Cuando iniciamos como auditores unos amigos y yo, nos quejamos de jornadas largas y extenuantes, con un sueldo que según nosotros no era acorde al esfuerzo empleado, sin embargo, no entendimos que se nos habrían las puertas al conocimiento al tener acceso a diferentes bases de datos de información, cursos gratis y al compartir de experiencia del conocimiento de nuestros jefes y de gente de experiencia que ahora son líderes del CINIF.

Cuando entendemos que todo lo aprendido en nuestro andar, a pesar de las largas jornadas, de los dolores de cabeza por las fallas de la plataforma del SAT, de los múltiples cambios en las reglas fiscales y para colmo, de la evolución de la norma contable que exige más de nuestro esfuerzo, nos damos cuenta de nuestro Desarrollo Profesional como Contadores y nuestra propia evolución en el entendimiento del mundo de los negocios, en donde apoyamos con nuestros servicios día a día.

Y después de este andar, entendemos que como Contadores también somos emprendedores, porque nuestro negocio que somos nosotros mismos, lo hemos ido construyendo para generar utilidades y conseguir nuestras propias metas.

Con todo el conocimiento y experiencia adquirida a través del tiempo, evolucionamos para no sólo preocuparnos del cumplimiento de las obligaciones fiscales de los contribuyentes, sino que ahora desarrollamos información financiera útil, oportuna y confiable con la cual las personas que toman decisiones de negocios en las empresas lo hagan con la mejor información disponible bajo las circunstancias.

El Contador provee, como valor agregado, informes de análisis de tendencias y variaciones del pasado; genera informes de los resultados de las operaciones realizadas y las compara con las metas establecidas por los empresarios, y busca tener las respuestas a las posibles preguntas sobre el porqué de las cifras presentadas.

El Contador, a través de su desempeño diario, prepara en cada registro contable la defensa natural y primaria ante una eventual revisión por parte del SAT, ya que al conocer el negocio, le da un sentido a cada registro contable acorde a la realidad del negocio, y se siente tranquilo y confiado de que cuando la autoridad hacendaria toque la puerta, todo saldrá bien porque tiene todo listo para mostrar que no se trabaja con dolo.

El Contador es un visionario, porque apoyado en las metas establecidas por la Dirección de las empresas, elabora proyecciones basándose en el pasado, que le sirven al empresario para saber en cada periodo contable, en donde debe enfocar las baterías sin descuidar lo que ha llegado al punto de ser eficiente y eficaz.
El Contador puede dar una opinión documentada sobre el tipo de riesgo financiero que la empresa puede asumir cuando requiere de financiamiento externo, respecto a plazo, monto y tiempo.

El Contador actual se apoya en los sistemas contables que muchas empresas de software las han denominado como inteligencia artificial, reduciendo a lo indispensable su labor manual, generado el tiempo necesario para evaluar la racionabilidad de las cifras, si reflejan la razón de negocio, si cubren con todos los aspectos relativos a la documentación que ampare la materialidad.

El Contador provee de recomendaciones de control interno para mejorar las actividades de control, que eventualmente le darán un beneficio a la empresa.

Y respondiendo a la pregunta de que si el Contador Público es un hombre clave en las empresas, definitivamente lo es, sólo falta que se dé cuenta que tiene todo el potencial para poder lograrlo.

El reto es grande, sin embargo, haciendo una retrospectiva de nuestra andar profesional, hemos vencido otros retos, así que éste será uno más a lograr, como parte de nuestro Desarrollo Profesional.

El conocimiento si no se utiliza en provecho de mejorar los negocios, se vuelve obsoleto y eventualmente caduco.

El camino que debe recorrer el Contador evoluciona todos los días, y con eso entiende que las respuestas que había logrado obtener ya no son suficientes, porque las preguntas han cambiado.

El Contador Público es un profesional en evolución continua, y definitivamente, es un Hombre Clave en los Negocios.

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